jueves, 24 de febrero de 2011

La cueva de los secretos...


Tengo en algún lugar, escondida,
la juventud que he gastado
lo siniestro de su guarida
es que no elegí donde guardarlo.

Dejo que sea el tiempo
quien almacene, su resguardo,
y haga que la senectud
evoque recuerdos del acto.

Me sabe mal haber perdido
esa afinidad con la locura,
sangre caliente que provoca
hechos,en una historia futura.

Ahora solo me queda buscar,
entre la maleza de recuerdos..
la velocidad, de aquella vida,
que llenó de arrugas los cuerpos.

Sobre la viruela del desdén
cantamos canciones de ayer
que nos producen recuerdos
y a mi, a mi me deja lamentos.

1 comentario:

Desvanecerse dijo...

Lo que se espera de una semilla es que de su enterramiento siempre brote.

Yo siempre he disfrutado de lo mejor de tí.

Besotes
Manino