miércoles, 30 de diciembre de 2009

Sobre un sueño común

Duermo sobre el arrullo del sueño,
me dejo, a la espalda, todos los versos.
No tengo nada que me pese
y el camino, solo, se hace etéreo...

No subo mucho, es mayor ese esfuerzo,
me dejo empujar por algún ronquido.
Vuelvo, envuelto en telas, a la escena
y no me pregunto, quién me arrulla...

Hay veces que hasta pienso lo que descanso,
que voy por donde mi viaje ha marcado.
Igual, la muerte, es todo esto, de continuo
y la vida solo es preparatorio...

Si, duermo y me llevo conmigo
los desperfectos que me dio la vida,
los desamores que he ido venciendo,
las caricias, el perdón y la agonía...

Dejo en la puerta... las mentiras.

3 comentarios:

SANTUARIO dijo...

Cuanto mas te aproximas al sueño, mas se va convirtiendo tu leyenda personal en la verdadera razon de vivir.

Desvanecerse dijo...

No busques en el sueño mas lejos de lo que el tiempo y las palabras suelen volar, que como las oportunidades son las cosas irrevocables de la vida.

Solo el destino se antepone a la imaginación.

Besotes
Manino

Anónimo dijo...

Dame un sueño que me entusiasme, y no una realidad que me abata.
Besos...