viernes, 15 de agosto de 2008

EL DEDO


Estoy aprendiendo a señalar con el dedo
sobre la arena del parque
entre niños y madres
dejando atrás los miedos y las vergüenzas
sobre el aroma de las flores
entre montañas y pinares
ya comulgo con todos los desconsuelos
sobre el valor de las cosas
entre palabras de aliento
contra todos aquellos, que mataron.

Ya no soy un cobarde entre asustados
miro por las calles,
de paseo
no me limito a mirar desde ventanas
canto en las esquinas
mil canciones
a esas acciones que cortaron el silencio
viudo de paz
ya no respeto
a esos matones que disparan por la espalda.

Ahora, por ti, querido desconsuelo
cambié mis pistolas
por pan
no encuentro maneras de sacar la bala
solo una mirada,
nada mas
y no veo un fin sin lucha, veo el dedo
indice de indicar
lo bueno
esa es mi arma, palabra quebrada.

Palabra, de la forma que sea
intenso universo
extenso universo,
es despedir los miedos conservados,
con mi pistola de agua
con mi chorro de alegria
aprendiendo a juzgar con el mazo libertario
mi mano blanca
blanca paloma...
y no descarto en condenar su altanería
y no descarto la vida
y no descarto, nada.

2 comentarios:

ELWIMG dijo...

ya era hora que volvieras, se te echaba de menos, noto que vuelves con fuerzas y así lo espero, necesitamos que sigas escribiendo, necesitamos leerte...
Felicidades por tu nueva poesía
es muy hermosa, bueno es como siempre,es como todas tus obras, llena de ti, de genialidad, llena de vida y de una inmensa belleza.
Gracias por aportar algo tan delicioso a nuestros días.
Un beso y un abrazo enorme...

Anónimo dijo...

Creo haber sentido al leerla que he leido a un poeta.
Intensa y sincera.
Genial.
Besotes
Manino